lunes, 26 de noviembre de 2007

Human links may be seen in gorillas' tools


Wild gorillas have been seen using "weapons" for the first time, giving a new insight into how early man learned to use sticks and stones for fighting and hunting millions of years ago.

Researchers observed gorillas in the Cross River area of Cameroon throwing sticks, clumps of earth and stones at human "invaders".

It is the first time that the largest of the great apes has been seen to use tools in an aggressive way.

Experts believe that our ancestors may have learned to use sticks and stones in a similar way to frighten away predators.

The scientists noticed the unusual behaviour during a three-year study. They believe the animals might have learned to throw objects from humans who were seen throwing stones at the gorillas.

Jacqueline Sunderland Groves, from the University of Sussex in Brighton, a member of the Wildlife Conservation Society team, said: "The area is largely isolated from other gorilla groups, but there are herdsmen on the mountain.

"In one encounter a group of gorillas threw clumps of grass and soil at the researchers while acting aggressively. Another gorilla threw a branch. A third encounter saw the gorillas throwing soil at a local man who was throwing stones at the apes."

A gorilla was seen to use tools once before in the Congo, using sticks to test the depth of water and to cross swampy areas.

The findings suggest that the use of tools may predate the evolutionary split between apes and humans six million years ago.

Fuente: http://www.telegraph.co.uk/

sábado, 24 de noviembre de 2007

Los micos de Patarroyo


CAMBIO revela pruebas que ponen en aprietos al científico por el tráfico ilegal de especies para su centro experimental de Leticia.

MANUEL ELKIN PATARROYO es uno de los científicos colombianos más mencionados en el país y en el mundo por sus investigaciones sobre la malaria y el desarrollo de una vacuna sintética para combatir una enfermedad que, cada año, afecta a entre 300 y 500 millones de personas y mata a cerca de tres millones, en su mayoría niños y mujeres embarazadas.

Autor de múltiples publicaciones sobre el tema en revistas especializadas tan prestigiosas como Nature, The Lancet y Vaccine, Patarroyo se convirtió en referencia obligada sobre el tema y en conferencista de foros mundiales sobre enfermedades infecciosas. El 1º de noviembre fue escogido por Scopus -una base de datos de las principales revistas científicas del mundo- como el investigador que más documentos especializados ha producido en Colombia, 316, y cuyas investigaciones han sido citadas 4.715 veces por investigadores internacionales.

Además de todo esto, desde hace 20 años Patarroyo ha sido un consentido de los gobiernos, que no han vacilado en destinar jugosas sumas a su laboratorio de investigación (ver recuadro), entre otras razones porque las primeras pruebas confiables de la vacuna -conocida como SPf66- primero en Colombia y luego en Tanzania, demostraron una eficacia cercana al 40%, un resultado modesto desde el punto de vista inmunológico, pero enorme desde la perspectiva de la salubridad. Por eso en 1994, el mismo año en que recibió el Premio Príncipe de Asturias por su descubrimiento, cantó victoria y en una entrevista que dio a la revista Estrategia dijo: "Yo ya marqué territorio, la vacuna es ya uno de los hitos más importantes de la historia de la parasitología".

Meses más tarde, invitado a clausurar la reunión anual de la Asociación de Escritores de Ciencia y Tecnología de Canadá, no se ruborizó al afirmar que si hubiera sido estadounidense, "ya me habría ganado el Premio Nobel". Poco después decidió donar los derechos de su vacuna a la Organización Mundial de la Salud, con lo cual no sólo se convirtió en uno de los científicos más admirados del mundo por su altruismo, sino que logró acallar las voces de sus detractores que habían manifestado sus reservas por el método completamente empírico que Patarroyo había utilizado para desarrollar la vacuna y porque no había seguido el protocolo establecido para las pruebas epidemiológicas.

Muchos se declararon entonces dispuestos a darle el beneficio de la duda a la SPf66. En Gambia y Tailandia se adelantaron pruebas de campo que no arrojaron resultados satisfactorios, frente a lo cual Patarroyo, incrédulo, dijo que la vacuna usada, fabricada en Estados Unidos, podía no ser idéntica a su SPf66. En efecto, contenía un porcentaje más alto de una sustancia que la vacuna original. Pero una prueba adicional hecha en Vigía del Fuerte, Chocó, por investigadores del Instituto Colombiano de Medicina Tropical con vacunas hechas en el Instituto Inmunológico del Hospital San Juan de Dios -el laboratorio de Patarroyo- confirmó los malos resultados.

A pesar de que el científico estaba en la dirección correcta, no había dado en el blanco. Pero no desfalleció y para disimular el fracaso comenzó a trabajar en vacunas contra otras enfermedades infecciosas como la tuberculosis, con la advertencia de que el objetivo no era desarrollar una vacuna contra la malaria sino una metodología para producir vacunas. Pero en 2001, la falta de recursos puso en jaque el proyecto. Deudas, embargos e hipotecas llevaron al desalojo de los tres edificios que tenía el Instituto en el San Juan de Dios, y Patarroyo y su equipo debieron trabajar en espacios prestados por el Instituto Nacional de Salud.

Sorteada la crisis, Patarroyo siguió adelante pero los problemas no se acabaron y hoy enfrenta serios cuestionamientos por la forma como adelanta los experimentos en la selva amazónica.

Daño ecológico

La médica veterinaria Lina María Peláez, una de las pocas profesionales de esta rama que ha trabajado con Patarroyo en Leticia y quien hizo parte del equipo de investigadores entre el 1º de abril de 2004 y el 10 de julio de 2005, renunció por motivos que especificó en su carta de renuncia: "El daño ecológico que causan las personas que sin previo entrenamiento capturan en forma indiscriminada a los micos de la especie Aotus nancymae y arrasan con los bosques primarios; la falta de permiso para experimentar con esta especie, pues el permiso es para otra; el incentivo para el tráfico indiscriminado de especies silvestres, ya que cualquiera viene a vender los micos, y la falta de resultados", son algunos apartes de su misiva.

Pero su queja principal era sobre todo porque las cosas no se hacían en la forma correcta. "A estos primates no se les ha realizado un estudio de dinámica poblacional -escribe-. Y no se ha realizado una programa de reproducción que sería lo más normal en una explotación como ésta".

Periodistas de CAMBIO viajaron al centro experimental de la Fundación de Inmunología de Colombia, Fidic, que dirige Patarroyo en Leticia, Amazonas, y aunque no les fue permitido el acceso, lograron obtener pruebas irrefutables del tráfico de las especies Aotus nancymae y Aotus vociferans -los indígenas los llaman micos nocturnos- desde las selvas de Perú y Brasil hacia el centro, y además verificaron que muchos mueren tras una larga agonía. Vea la galería de fotos.

Irregularidades

La Corporación para el Desarrollo Sostenible del Sur de la Amazonía, Corpoamazonía, tiene abierto un expediente (No.000102) por denuncias sobre irregularidades cometidas por el equipo de investigadores del centro experimental. Hay evidencia de que personas procedentes de Perú y Brasil venden animales al Fidic sin haber realizado los trámites de legalización ante sus gobiernos, y además existe gran preocupación porque el centro recibe animales muy jóvenes, lo cual deriva en la disminución de la población porque no quedan animales para la reproducción.

Las inquietudes de la Corpoamazonía se basan también en conceptos de especialistas, como Sara Benneth, una bióloga experta en conservación ambiental que el pasado 15 de septiembre hizo serios reparos a la actividad que desarrolla Patarroyo con los primates y señaló la inconveniencia de que muchos de los animales para los experimentos provengan de países vecinos.

Por su parte, Claudia Marín, funcionaria de Corpoamazonía, descubrió en una visita que hizo al centro experimental el pasado 19 de octubre que algunos animales estaban en pésimo estado de salud (ver fotos), que otros sobrepasaban el tiempo límite de estancia y, lo más grave, que no existe un plan de rehabilitación para los que debían ser liberados. "También encontramos en los libros que la mayoría de ejemplares habían sido traídos sin autorización de Perú y Brasil", le dijo Marín a CAMBIO.

Sin embargo, la página de Internet del centro experimental dice que las pruebas con micos no contemplan la muerte o el sacrificio de los animales y que "los animales serán manipulados y mantenidos apropiadamente para generar resultados confiables que garanticen las mejores condiciones para los animales en experimentación". Las fotos tomadas por CAMBIO demuestran lo contrario en algunos casos.

Permiso renovado

No obstante los reparos científicos y el cúmulo de denuncias contra los experimentos de Patarroyo, Corpoamazonía renovó el permiso que le dio al Fidic el 13 de septiembre de 2006, para capturar, durante ocho meses, 1.600 ejemplares de la especie Aotus vociferans en San Juan de Atacuari y las islas del río Amazonas que están en el trayecto Leticia-Puerto Nariño, en la parte colombiana. Una renovación que el director de Corpoamazonía, Helber Huerfia, considera en orden, pero que cuestionan algunos funcionarios que no se explican por qué Patarroyo la obtuvo si contra él hay un proceso en marcha. "Yo fui al Ministerio del Medio Ambiente y evaluaron los pros y los contras de ese permiso, y abogados de la institución dijeron que no había problema -asegura Alejandra Galindo, bióloga de Corpoamazonía- Definitivamente ese señor se mueve en los grandes círculos y todo lo hace posible".

Esta opinión coincide con la que Peláez expresó en su carta de renuncia y en la que hace alusión a la influencia de Patarroyo en los círculos de poder: "Actualmente no se cuenta con el permiso (que además está dado para otra especie) y no sería justo que lo concedieran por la razón mencionada anteriormente (el sufrimiento y el estrés de los animales, y la falta de resultados), sólo que en este país cuenta más tener amigos y hablar con mucha gente para que las cosas sean hechas de manera corrupta".

Todo por la plata

Algo anormal está ocurriendo en el centro experimental que dirige Patarroyo. A principios de octubre, más de 15 indígenas de la comunidad Ticuna del Perú emprendieron una travesía de cinco horas en lancha, desde el resguardo de Puerto Alegre hasta Leticia, para llevar al centro experimental más de 120 micos de la especie Aotus capturados en zona peruana.

Ese día, como casi todos las semanas, debieron evitar que las autoridades colombianas detectaran el botín que llevaban a bordo y que sería vendido por 600.000 pesos. Llegaron cerca de las 5:00 a.m. al centro, donde fueron recibidos por el biólogo Raúl Rodríguez, quien luego de revisar el encargo les entregó el dinero y les habló de la necesidad de conseguir más micos nocturnos en el menor tiempo posible.

Sin embargo, antes de despedirse les advirtió: "En este centro trabajamos con el insumo que ustedes nos proveen, pero tengan cuidado con las autoridades colombianas porque nadie se puede enterar de que estos animales son peruanos o brasileros. No respondemos si alguno de ustedes se deja pillar y termina en la cárcel". Y es que el Código Penal colombiano dice en el artículo 328: "El que introduzca, explote, transporte, trafique, comercie, aproveche o se beneficie de los especímenes, productos o partes de los recursos fáunicos, incurrirá en prisión de dos a cinco años". Pero, además, el artículo 334 advierte: "El que sin permiso de autoridad competente realice experimentos, introduzca o propague especies animales, vegetales, hidrobiológicas o altere la población animal o vegetal, incurrirá en prisión de dos a seis años".

También es claro que el grupo de Patarroyo ha pasado por alto los principios éticos de la investigación biomédica, adoptados en la Asamblea Médica Mundial llevada a cabo en Helsinki, Finlandia, en 1964. En su duodécimo numeral, la conocida Declaración de Helsinki establece: "Al investigar, hay que prestar atención adecuada a los factores que puedan perjudicar el medio ambiente. Se debe cuidar también del bienestar de los animales utilizados en los experimentos".

Los periodistas de CAMBIO fueron a Puerto Alegre, una población peruana de no más de 30 viviendas, a dos horas de Leticia por el río Amazonas, donde los indígenas, aparte de la agricultura, viven de la venta de micos al centro experimental. Uno de ellos, Víctor González, de 39 años, que ya perdió la cuenta del tiempo que lleva capturando micos, le contó a CAMBIO sobre esta actividad: "Los micos son muy esquivos con los humanos y para capturarlos debemos arrasar con 30 metros de bosque alrededor del árbol donde se encuentran. Si no hacemos eso, el mico se nos vuela. Debemos llevar los animales a Leticia en la madrugada, escondidos, para no dejarnos ver de las autoridades porque si nos cogen nos dan tres años de cárcel. El doctor Patarroyo nos ha dicho que tengamos cuidado con eso y que si nos coge la ley digamos que los animales los capturamos del lado colombiano".

En Barranquilla, un corregimiento peruano a cuatro horas de Leticia por el Amazonas, los indígenas Evin Santos y Yolvin Santajaya también hablan del tráfico de micos. "Llevo cuatro años capturando micos y a veces creo que ya se están acabando -dice Santos- Raúl, que trabaja para el doctor Patarroyo, me paga 50.000 pesos por cada uno. Para evitar sustos a veces envío los micos con mi tío Carlos Barbosa que tiene cédula colombiana". Por su parte, Santayana dice: "Lo único que nos interesa es la plata y el doctor Patarroyo paga bien por cada mico".

Como ellos, indígenas de Chinería, Gamboa, Yahuma, Vista Alegre, San José de Yanayaco y San Mguel en Perú, y de Bon Sitio, Tucano, Sacambú y Puerto Brasil en Brasil, llegan los viernes al centro experimental de Patarroyo para vender micos de las dos especies, una de las cuales, la Aotus vociferans, está en peligro de extinción si no se controla su comercio, según la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies de Fauna y Flora en Peligro, CITES.

CAMBIO tuvo acceso a documentos del centro experimental, correspondientes a 2004 y 2005, y en ellos aparecen listados completos de proveedores, fechas y procedencia de los animales, que demuestran el tráfico ilegal de micos de los países vecinos.

¿Por qué el doctor Patarroyo compra ilegalmente micos capturados en Perú y Brasil si durante años ha tenido permiso para hacerlo en Colombia? La respuesta parece tenerla Marta Bueno, profesora asociada del Departamento de Biología de la Universidad Nacional: "En Colombia puede encontrase esta especie en pequeñas cantidades, pero según una clasificación de las especies de Aotus, hecha por especialistas en 1983, los Aotus nancymae habitan especialmente las selvas de Perú y Brasil".

El asunto no es nuevo para el Ministerio del Ambiente en Bogotá. Según Claudia Rodríguez, del área de Ecosistemas, hace dos años el Ministerio intervino en una controversia entre Corpoamazonía y Patarroyo, y aunque había alguna evidencia de irregularidades la investigación no terminó en nada.

En Perú y Brasil, funcionarios de entidades ambientales le aseguraron a CAMBIO que aunque tienen información parcial sobre el tráfico de micos para el científico Patarroyo, no han podido hacer nada, entre otras razones porque las autoridades colombianas no controlan el ingreso de especies de otros países. "Desde hace dos años he recibido informes sobre este asunto y si un país actúa y el otro no, se vuelve improductiva nuestra labor -aseguró Hermes Nunes Boges, jefe del Instituto Brasilero del Medio Ambiente, IBAMA-. Estamos intentando una reunión con la Comisión de Vecindad para que unifiquemos las leyes en este sentido".

Por su parte, Jaime Santander, del Instituto de Recursos Naturales de Perú, INRENA, dijo que aunque su despacho no ha recibido denuncias concretas, tiene información de que el médico colombiano está aprovechando de manera ilegal la fauna peruana. Y remató: "Lo cierto es que no hemos entregado permisos para explotación de micos".

CAMBIO intentó sin éxito comunicarse con el doctor Patarroyo. Tanto en el Fidic en Bogotá como en el centro de Leticia dijeron que estaba fuera del país y que salvo él nadie podía hablar sobre el tema.

La pelota está ahora en el campo colombiano. ¿Qué harán las autoridades competentes? ¿El Gobierno seguirá dándole recursos a Patarroyo, como lo ha hecho hasta ahora? ¿No es hora ya de poner en blanco y negro los experimentos del científico colombiano?

MUCHO TILÍN, TILÍN...

El pasado 26 de septiembre, el Ministro de Protección Social, Diego Palacio, envió una carta al Director General del Instituto Colombiano de Desarrollo de la Ciencia y Tecnología, Colciencias, en la que le pide que en los procesos para adjudicar recursos para investigación se asegure de que "todos los participantes reciban la información sobre convocatorias, calificación y resultados de evaluación".

La carta envía un mensaje subliminal, pues desde hace cinco años los recursos del Ministerio destinados a investigación han ido a parar a una sola mano: la del científico Manuel Elkin Patarroyo. Por esta razón, desde enero del año pasado, decidió responsabilizar a Colciencias de la asignación de los recursos por medio de un concurso de méritos. "La idea es no entregar los dineros a una sola persona como se venía haciendo desde 1989", le dijo a CAMBIO un alto funcionario del Ministerio.

Y es que desde 1989 hasta hoy, Patarroyo ha recibido más de 64.000 millones de pesos para su centro de investigación y experimentación, mientras otras entidades o no reciben nada o sólo reciben migajas.

"Él se creía el dueño del presupuesto. Por eso, en los últimos años hemos dado la pelea para que los recursos no vayan a parar sólo al centro de este científico, entre otras cosas porque no vemos los resultados que anunció", le dijo a CAMBIO la misma fuente.

Patarroyo, acusat de tràfic de micos al sud de Colòmbia


1. • El científic compra animals del Perú i el Brasil il.legalment, segons les denúncies
2. • "El doctor paga bé per cada mico", va declarar un indi peruà a la premsa


EL PERIÓDICO
BOGOTÀ

Tretze anys després de rebre el premi Príncep d'Astúries gràcies a la seva vacuna contra la malària, el colombià Manuel Elkin Patarroyo ha baixat un altre esglaó en el lent però sostingut procés de descrèdit que ha viscut des d'aleshores. A la relativa ineficàcia de la vacuna i als problemes de finançament que ha patit en els últims anys s'hi afegeix ara una acusació greu: la de traficar amb micos des de la seu de l'Institut d'Immunologia de Colòmbia (FIDIC) que dirigeix a Leticia (sud del país).
Un article publicat en l'edició d'aquesta setmana de la revista colombiana Cambio explica amb detall la situació. La Corporació per al
Desenvolupament Sostenible del Sud de l'Amazònia, Corpoamazonia, ha rebut diverses denúncies sobre "actuacions irregulars" comeses per l'equip d'investigadors del centre científic on Patarroyo, ara, s'esforça per posar a punt una metodologia per a la producció de vacunes. Les denúncies apunten al fet que el mateix científic colombià promou el tràfic de micos des de les selves del Brasil i Perú. Té permís per capturar-los a l'Amazònia colombiana, però allà resulta difícil trobar-ne en la quantitat necessària per proveir la investigació.
"Hem de portar els animals a Leticia de matinada, amagats, perquè les autoritats no ens vegin, perquè si ens agafen ens tanquen tres anys a la presó. El doctor Patarroyo ens ha dit que anem amb compte amb això, i que si ens agafa la llei diguem que els animals els capturem de la banda colombiana", va declarar un indi peruà en un casalot situat a 30 quilòmetres de Leticia.

DESAVINENCES INTERNES
Corpoamazonia va optar per obrir una investigació, però això no li va impedir renovar el permís del FIDIC per capturar micos (del costat colombià). Les dues espècies que Patarroyo utilitza en les seves investigacions són l'Aotus nancymae i l'Aotus vociferans, i la revista colombiana afirma haver trobat proves "irrefutables" que desenes d'exemplars han passat la frontera colombiana sense els permisos respectius dels governs peruà i brasiler. "El doctor Patarroyo paga bé per cada mico", va dir un altre proveïdor d'aquests animals. La llei colombiana castiga el tràfic d'espècies amb un màxim de cinc anys de presó.
El cas és que Patarroyo ha tingut problemes fins i tot amb els seus col.laboradors més pròxims. Un d'ells, la metge veterinària Lina María Peláez, no només va dimitir del seu treball a Leticia, sinó que va escriure una carta de renúncia plena d'acusacions. "A aquests primats no se'ls ha fet un estudi de dinàmica poblacional. Tampoc s'ha fet un programa de reproducció, que seria el més normal en una explotació com aquesta". Cambio diu que té proves que els micos són maltractats.

DE VIATGE
Peláez assegura que Corpoamazonia li va renovar la llicència per les seves influències polítiques. Mentre Patarroyo dóna la seva versió dels fets --estava de viatge i la revista no va poder parlar amb ell--, l'article ha encès el debat entre els defensors a ultrança del científic i els que ja hi han perdut la fe.

Fuente: El Periódico de Catalunya, 24-11-2007

lunes, 19 de noviembre de 2007

Els contractes laborals encara no cobreixen tots els doctorands

1. • Molts becaris no cotitzen ni tenen dret a atur malgrat l'estatut del 2006
2. • El finançament de projectes s'utilitza a la pràctica per fer tesis doctorals

MÉS INFORMACIÓ

* L'opinió dels afectats

MICHELE CATANZARO
BARCELONA

Uns 300.000 nous investigadors el 2010. Quan la Unió Europea es va plantejar aquest objectiu per no perdre la carrera de la competitivitat --la denominada Estratègia de Lisboa del 2000--, va recomanar als estats membres que es dignifiqués la carrera investigadora des del seu inici. Espanya ha fet el desentès. Els estatuts del becari promoguts pels governs del PP i el PSOE no han impedit que universitats i fundacions convoquin beques predoctorals que no arriben a 1.000 euros mensuals ni a un any de durada, no cotitzen a la Seguretat Social ni tenen dret a atur.
Fins fa uns quants mesos, Ana López era doctoranda en Belles Arts de la Universitat de Granada, on estudiava els manuscrits d'Al-Andalus. "Em pagaven una beca de 900 euros al mes que havia de renovar cada sis mesos. Després de la tercera renovació, em vaig quedar quatre mesos sense beca i finalment em van contractar: les taxes les van treure del sou i vaig passar a cobrar 700 euros". Ara està contractada per la Biblioteca Nacional de París. Una becària doctoranda en Biologia que prefereix mantenir l'anonimat es pregunta: "¿Què seria de mi si tingués un accident amb productes perillosos o si em quedés embarassada? ¿Com pagaré el pis després de defensar la tesi?".

"INVESTIGAR ÉS TREBALLAR"
Els joves investigadors participen en el 90% de les publicacions científiques espanyoles, segons Elena Piñero, president de l'associació de doctorands catalans D-Recerca. No obstant, un article publicat a la revista Nature a l'octubre subratllava que "rarament Espanya proporciona fons suficients als seus doctorands".
"Investigar és treballar", va dir José Luis Rodríguez Zapatero en l'última campanya electoral. No obstant, l'Estatut del Personal Investigador en Formació (EPIF), aprovat pel seu Govern el 2006, "va ser una decepció", explica Marc Heymann, doctorand en Criptografia i membre de D-Recerca. "Segons l'EPIF, només els dos últims anys de doctorat han d'estar coberts per contracte i fins i tot aquesta obligació es pot obviar". Efectivament, se segueixen convocant beques que no preveuen el pas al contracte. Entre les més recents, les de Caja Madrid, de les fundacions Empresa-Universitat de Navarra, Campollano i Parc Científic d'Albacete, del CSIC-Bancaixa i de les Corts Generals.
Però la situació més anòmala és la de les "beques a càrrec de projecte". "Universitats i investigadors convoquen beques per a doctorats, obviant l'EPIF amb l'excusa que serveixen per a projectes puntuals", explica Piñero. "En moltíssims grups hi ha investigadors en aquesta situació". Josep Benito, doctorand a càrrec de projecte de la Universitat de Girona, que estudia els efectes ecològics de la contaminació de l'embassament de Flix, afegeix: "Encara que només estiguéssim desenvolupant un projecte, ¿no seria igualment un treball digne d'un contracte?".
"Els doctorats finançats per la Generalitat són coberts per un contracte a partir del segon any", replica Estanislau Fons, de l'Agència de Gestió dels Ajuts Universitaris a la Recerca (AGAUR). "Però no podem entrar en la gestió dels fons de les universitats", insisteix. No obstant, la Federació de Joves Investigadors ha aconseguit, per exemple, que algunes beques de projecte de la Universitat Politècnica es converteixin finalment en contractes.

TREBALLADORS BARATS
Els investigadors són pessimistes respecte al futur. "Els becaris són treballadors barats especialment atractius per les empreses privades que participen en la recerca", comenta Laia Ribas, doctora en Biologia que investiga un virus que extermina les granotes. "La convergència europea, amb l'aparició del màster entre la llicenciatura i el doctorat, difuminarà més l'inici de la investigació professional", afegeix Piñero. David González, doctorand en Química de la UAB, resumeix: "La investigació no progressa fitxant científics estrella, sinó invertint en joves capaços de generar idees".

Fuente: El Periódico de Catalunya, 19-11-2007

domingo, 18 de noviembre de 2007

Mama, Is That You? Possible Ape Ancestor Found


Jennifer Viegas, Discovery News


Nov. 12, 2007 -- A toothy, nut-chomping large ape from Kenya may represent a new species that was, or was very close to being, the last common ancestor to gorillas, chimpanzees and humans, according to a new study that outlines the recently discovered, 10 million-year-old species.

Called Nakalipithecus nakayamai, the ape lived within a critical window of evolutionary time.

Lead author Yutaka Kunimatsu explained to Discovery News that molecular studies of living apes indicate gorillas, chimps and humans diverged from each other in Africa during the Late Miocene 11-5 million years ago.

"Nakalipithecus is derived from Africa and from an appropriate age," Kunimatsu, a Kyoto University primate researcher, said.

Fossil remains of the species, excavated by the researchers in the Samburu Hills of northern Kenya, include a jawbone and 11 telltale teeth.

"Based on the dentition, (the ape) was approximately the size of female gorillas to orangutans and it had thick enamel and low, voluminous cusps on its cheek teeth," Kunimatsu explained, "so it is likely that this ape ate a considerable amount of hard objects, possibly nuts or seeds."

Other studies suggest the landscape of northern Kenya at the time would have consisted of woodlands with some open patches.

The findings were published today in the Proceedings of the National Academy of Sciences.

An odd twist to the find is that the new ape most closely resembles another related species, Ouranopithecus macedoniensis , from Greece. Some researchers had even thought the Greek ape was the last common ancestor, or at least close to it.

The Africa/Greece connection likely was due to apes on the move, according to Kunimatsu. He said the oldest known ape fossil dates to 25 million years ago and was found in northern Kenya.

"It is 16-17 million years ago that apes started to appear in the fossil record in Europe, and 13 million years ago in Asia," he said. "It is therefore natural to think that the ancestor of all apes originated in Africa and then, during the course of evolution, some apes went out of Africa and dispersed into Europe and Asia."

Martin Pickford, a paleontologist at the National Museum of Natural History in Paris, believes the latest finds are extremely significant.

"I can't overstress the importance of these fossils from the Late Miocene of Kenya," Pickford told Discovery News. "They are just what the doctor ordered for those of us interested in the divergence between the African apes and humans."

He explained that some researchers previously theorized that the ancestor to African apes and primates may have originated in Eurasia, since so many early ape fossils come from Asia and southern Europe-primarily Greece, Turkey and Bulgaria. The hypothesis was "an offspring of the previous dearth of African fossils from the Late Miocene," he said.

Pickford added, "But now, this tremendous black hole is being filled, and by fossils which show clear affinities with extant African apes and humans."

While scientists continue to debate which ape may have been the actual "mother" of all living great apes, including humans, Africa now appears to have been its homeland, with related lineages that sprung up in Ethiopia, Greece and Turkey.

The entire matter, Pickford said, is "very intriguing and food for thought...indeed, a feast for thought."

Tool-Wielding Chimps Provide a Glimpse of Early Human Behavior


PHOTO EDITORS: High-resolution images are available at http://www.news.wisc.edu/newsphotos/chimpsUsingTools.html


Newswise — Chimpanzees inhabiting a harsh savanna environment and using bark and stick tools to exploit an underground food resource are giving scientists new insights to the behaviors of the earliest hominids who, millions of years ago, left the African forests to range the same kinds of environments and possibly utilize the same foods.

Writing today (Nov. 12) in the Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), a team of researchers including University of Wisconsin-Madison anthropologist Travis R. Pickering reports evidence of tool use among rare savanna chimps to harvest edible tubers, roots and bulbs.

The finding is important because it chips away at behaviors once seen as uniquely human. It supports the notion that chimpanzees, our closest living evolutionary relatives, can serve as models for understanding some aspects of the lifestyles and behaviors of the earliest members of the human family.

The new study demonstrates that “the understanding and capability to exploit these resources were very likely within the grasp of the first chimp-like hominids,” argues Pickering. “It was widely believed that it is a uniquely human adaptation to use tools to dig these things up.”

R. Adriana Hernandez-Aguilar of the University of Southern California collected field data as part of her dissertation over nearly two years in the Ugalla Forest Reserve of western Tanzania, an arid woodland savanna that is home to a small population of chimpanzees that have adapted to life beyond the apes’ typical forest habitat. Research at the site has been coordinated by the study’s other co-author, Jim Moore of the University of California at San Diego, since 1989 under the aegis of the Ugalla Primate Project.

“Chimpanzees are not australopithecines, and we can’t conclude that if they do something today, our ancestors must have done it then. But, when integrated with research on the fossil and paleoecological record, modern analogies are useful for investigating our past,” Moore explains. “In this case, the Ugalla chimpanzees suggest that underground resources were within reach of our ancestors with similar brain size and hand morphology.”

A surprise finding, Moore, Pickering and Hernandez-Aguilar explain, was that the chimps feasted on underground food resources during the food-rich rainy season, and not as a fallback in times of scarcity. That observation, says Moore, “challenges our current hypotheses about the role of such foods in hominid evolution and may help reframe the scientific debate.”

Chimps at Ugalla, the authors explain, are facing environmental challenges similar to those of our human ancestors 5 million or so years ago when shifting climate greatly reduced the forests favored by early hominids.

For chimpanzees today, and likely for our human ancestors, open woodlands such as the Ugalla Forest Reserve are marginal habitats where the ability to adapt is challenged. But woodland savannas are also rich in the types of plants that store nutrients in what scientists call underground storage organs — tubers, roots and bulbs of various types. It has been hypothesized that early hominids’ access to such resources through the use of tools was a critical innovation that helped power human adaptation to savanna environments.

“Until now, it has been believed that such food resources, buried beneath the surface of the soil, were beyond the reach of modern chimpanzees,” according to Moore.

The underground storage organs of plants in Ugalla can be difficult to get at, as the tubers and roots can be obtained only by cracking a tough layer of earth. To do so, the chimps apparently use sticks, pieces of logs and sturdy bark to penetrate a hard crust of soil to reach looser layers of dirt in which the tubers are found.

While researchers were unable to directly observe the savanna chimps in the act of using tools to dig up the tubers, evidence of such activity by the chimps was found at 11 different sites in Ugalla. Ten of the sites were directly beneath chimpanzee nests. The spoor of chimps — but no other animals — including knuckle prints, feces and chewed wads of the fibrous tubers, provided evidence that the apes were taking advantage of the underground food resource.

Three of the sites, according to the new PNAS report, yielded seven sediment-encrusted digging tools. The worn edges and patterns of adhering sediment of the sticks and bark recovered from the sites implied their use as implements for reaching the tubers.

Some of the underground storage organs excavated by the Ugalla chimps are fibrous and have the appearance of uncooked potatoes, according to Pickering. The chimps chew them like gum to extract nutrients and spit out indigestible wads of fiber. Some of the plants used by the chimps, notes Hernandez-Aguilar, are used as food or medicines by humans.

Chimpanzees in many parts of Africa are known to consume leaves of several species for medicinal purposes and it will be interesting if it is confirmed in the future that chimps in Ugalla consume underground storage organs for their medicinal properties,” says Hernandez-Aguilar.

In Ugalla, chimpanzee density is low, but recent survey data suggest the vast majority of Tanzania’s chimps live in such woodlands. The Ugalla woodland savanna may parallel environments of 5 million years ago when early hominids, the forebearers of the modern human lineage, adapted to the savanna as major climate change dramatically reduced the continent’s forests.

“Savanna chimps, we would contend, are dealing with environmental constraints and problems — evolutionary pressures — that our earliest relatives would have dealt with as well in similar environments,” Pickering explains.

And because the tools are organic in nature and subject to rapid decay, evidence of such tool use by early hominids is unlikely to be found in the archaeological record.

In the case of the human lineage, the move to a new environment, scientists believe, triggered the development of anatomical features such as big jaws and powerful grinding teeth to cope with a shift in diet to foods like the underground storage organs of plants.

The new work showing tool-assisted digging by the Ugalla chimps — as well as others’ recent work with another population of savanna chimps who use sticks as small spears to impale bush babies — makes these types of chimps unique and argues for the importance of conserving and studying them further.

“The insights that they may continue to provide concerning human evolution might prove to be quite significant,” Pickering argues.

The study was funded by the LSB Leakey Foundation, the National Science Foundation, the Jane Goodall Center at the University of Southern California, the University of California Committee on Research, and the Palaeontology Scientific Trust.

Primates en peligro


El 29% de los primates se enfrenta a una amenaza de extinción sin precedentes debido a la destrucción de los bosques tropicales y el comercio y la caza ilegales

El 29% de las 625 especies y subespecies de primates se encuentra en peligro de extinción, según un reciente informe de la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN) y la Sociedad Internacional de Primatología (IPS), en colaboración con Conservación Internacional (CI). El estudio se une a otros elaborados en los últimos años para seguir recordando las amenazas que sufren estos parientes de los seres humanos.

Autor: Alex Fernández Muerza | Fecha de publicación: 5 de noviembre de 2007


El informe, elaborado por 60 expertos de 21 países, recoge un listado de los 25 primates más amenazados del mundo, e incluye la información de evaluaciones similares realizadas desde el año 2000. Algunas especies de la lista, como el Orangután de Sumatra, están desapareciendo a una velocidad mayor que otros primates. Ocho de los primates incluidos en esta lista, como el citado Orangután de Sumatra, el de Indonesia y el Gorila occidental del río Cross, de Camerún y Nigeria, ya se citaron en las tres listas previas. Otras seis especies aparecen en la lista por primera vez.

Por ejemplo, el Colobo rojo herrumbroso, una especie de Costa de Marfil y Ghana, se enfrenta ya a la extinción; mientras que el Langur de cabeza dorada, de Vietnam, y el Gibón de copete negro de Hainan (China) apenas cuentan con una docena respectivamente. En Sri Lanka, el Loris delgado de la planicie Horton ha sido visto apenas cuatro veces desde 1937. Otras especies de número y distribución limitada descubiertos en años recientes son también particularmente vulnerables.

El número de individuos de estas 25 especies amenazadas es tan reducido que todos sus miembros se podrían colocar en un estadio de fútbol

El número de individuos de estas 25 especies amenazadas es tan reducido que todos sus miembros se podrían colocar en un estadio de fútbol, según el Presidente del Grupo de Especialistas en Primates de la Comisión de Supervivencia de Especies de la UICN, Russell Mittermeier. La Lista Roja de la UICN clasifica 114 especies de primates de las 394 evaluadas como amenazadas de extinción, un número que ha ido aumentando desde la elaboración de la primera Lista.

Por regiones, la peor situación se sufre en Asia, con 11 de las 25 especies amenazadas, seguido de África, con siete, Madagascar, con cuatro, y América del Sur, con tres. En este sentido, se trata de zonas con la mayor biodiversidad del mundo: 34 regiones son catalogadas por CI como "altamente prioritarias", puesto que en una superficie que cubre apenas el 2,3% de la Tierra, albergan más de la mitad de toda la diversidad de plantas y animales de la Tierra.

Principales amenazas

Entre las principales razones de la disminución del número de primates, los investigadores del informe señalan la pérdida del hábitat, debido a la desaparición de los bosques tropicales por la agricultura, la tala y la obtención de leña. Asimismo, apuntan al cambio climático como factor que está alterando el hábitat de muchas especies. Por ello, reclaman mayores esfuerzos para proteger los bosques tropicales, lo que permitirá salvar no sólo a los primates, sino a otras especies en peligro, y prevenir el calentamiento global.

Además, la caza para la subsistencia y para fines comerciales es otra de las mayores amenazas a los primates, especialmente en África y Asia. Igualmente, su captura en estado vivo para comercio como mascotas, particularmente en el caso de especies asiáticas, es también otro de sus peligros. Por ejemplo, orangutanes y gibones son cazados en Madagascar como mascotas o para su uso en medicina tradicional, principalmente en China.

En este sentido, hace unos meses, otro informe elaborado por las organizaciones Care for the Wild International y Pro Wildlife denunciaba la caza de millones de ejemplares de primates, sobre todo en Latinoamérica. El estudio subrayaba que especies de gran tamaño, como los monos araña o los monos carablanca, han desaparecido ya de muchas regiones. La utilización de armas modernas, el aumento de las poblaciones humanas en el hábitat de estas especies, y el hecho de que se reproduzcan lentamente y vivan en densidades de población bajas incrementa sus riesgos.

Por su parte, el Atlas Mundial de los Grandes Primates y su Conservación, publicado en 2005 por la ONU, señalaba que los asentamientos humanos, la tala de bosques y la minería podrían hacer perder a los orangutanes en partes de Indonesia la mitad de su hábitat en los siguientes cinco años. El informe indicaba que todos los grandes simios están en peligro crítico, por lo que su número ha caído o caerá un 80% a lo largo de tres generaciones. Klaus Toepfer, director ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) hasta 2006, ha afirmado que en la próxima década podrían extinguirse los grandes simios.

Importancia de los primates en la biodiversidad

El orden Primates incluye al ser humano y a sus parientes más cercanos, dividiéndose en dos subórdenes. Por un lado, los lémures y los loris se clasifican en el suborden de los estrepsirrinos; por otro lado, el suborden de los haplorrinos incluye a los tarseros, los monos, los grandes simios y los humanos. La primatología es la rama de la zoología que estudia a estas especies.

Según los científicos, la distribución de los primates no humanos en la actualidad es mucho menor que en épocas anteriores, aunque todavía se pueden observar ejemplares salvajes en todos los continentes, excepto en Oceanía, Europa y la Antártida. Los primates viven en su mayoría en selvas, aunque muchas especies se han adaptado secundariamente a las grandes sabanas.

Además de ser nuestros parientes más cercanos, los primates son importantes para la salud de los ecosistemas. Según los expertos de la UICN, a través de la dispersión de semillas y otras interacciones con sus ambientes, los primates ayudan a la supervivencia de un amplio rango de plantas y animales de los bosques de la Tierra.



viernes, 16 de noviembre de 2007

VI. Göttinger Freilandtage


VI. Göttinger Freilandtage
Primate Behavior and Human Universals
December 11 - 14, 2007


General information

The Göttinger Freilandtage is a bi-annual international conference on timely topics in primate behaviour, ecology and evolution organised by the Department of Behavioral Ecology & Sociobiology at the German Primate Centre (Deutsches Primatenzentrum). This meeting differs from many other conferences in that (1) one topic is comprehensively analysed from different perspectives, (2) leading experts focus on this topic for several days, and (3) there is plenty of time for formal and informal discussion. To achieve these goals, these meetings mainly feature presentations by invited speakers, but opportunities for contributed talks and poster presentations are provided as well.

Scientific framework

The idea for this meeting dates back to the publication of the chimpanzee genome in 2005. Comparison with the human genome revealed that the two species differ in only about 1% of the coding bases that can be aligned in the two data sets. This means that a relatively small number of genetic differences provide the blueprint for the anatomical, physiological and behavioural traits that makes us human. What exactly these human universals are, particularly in the social, cultural, emotional and cognitive domains of our behaviour, and whether or not they have a genetic basis, has remained controversial, however. Moreover, there is increasing evidence from human behavioural ecology that many human behavioural adaptations for survival and reproduction follow basic evolutionary principles, whose effects are also exhibited by chimpanzees and the other members of the primate lineage. Human behaviour can therefore be constructively analysed by focusing on both sides of the coin, potential universals as well as general adaptations resulting from natural, sexual and kin selection that should also be evident in other primates.

This conference therefore aims to bring together primatologists, evolutionary anthropologists and psychologists to summarise our current state of knowledge concerning behavioural variation and its determinants within the order Primates, including humans. Specifically, it will focus on three aspects: (1) comparative studies of behavioural adaptations across (human and non-human) primates that examine evolutionary principles, (2) the ability and failures of evolutionary theory to explain human behavioural traits that affect survival and reproduction, and (3) to identify and explain human behavioural universals.

The core of the conference is organised in such a way that a pair of plenary speakers will address salient aspects of social behaviour from a primate and human perspective, respectively. The conference will also be open to a limited number of shorter contributed papers (and posters) on these topics. We therefore invite all those interested in primate and human reproduction, life history, intergroup and prosocial behaviour, cognition, communication and culture to attend our conference either as a discussant or as an author of an oral or poster presentation on one of these topics.


Scientific Program

Tuesday, 11. 12. 2007


16:00 Arrival and registration
(Paulinerkirche, Papendiek 14)
18:00 The history of the Pauliner Church
Silke Glitsch (Universität Göttingen)
18:05 Mind the gap: Primate origins of human nature
Carel van Schaik (Universität Zürich, Switzerland)
19:30 Reception by the city of Göttingen at the historic town hall (Altes Rathaus)
Katharina Lankeit (Mayor of Götttingen)
Stefan Treue (Scientific Director, Deutsches Primatenzentrum)
Stefan Schulz-Hardt (Dean of the Biology Faculty, Universität Göttingen)

Wednesday, 12. 12. 2007


8:30 Conference introduction
(Max Planck Institute for Biophysical Chemistry, Am Fassberg)
Peter Kappeler (Universität Göttingen & Deutsches Primatenzentrum, Germany)
Chair: Carel van Schaik
8:45 Intergroup aggression in primates and humans: the case for a unified theory
Richard Wrangham (Harvard University, USA)
9:30 Why war: motivations for fighting in the human state of nature and after the onset of cultural co-evolution
Azar Gat (Tel Aviv University, Israel)
10:15 Morning coffee & tea
Chair: Dorothy Cheney
10:45 Primate social cognition
Michael Tomasello (MPI EvA, Leipzig, Germany)
11:30 Maternal effects in the development and evolution of social cognition
David Bjorklund (Florida Atlantic University, USA)
12:15 General intelligence in non-human primates
Simon Reader (Utrecht University, Netherlands)
12:35 Macachiavellian intelligence: How rhesus macaques and humans have conquered the world
Dario Maestripieri (University of Chicago, USA)
12:55

Lunch

Chair: Michael Tomasello
14:00 The evolutionary origins of human patience
Jeffrey Stevens (MPI Human Development, Berlin, Germany)
14:20 Dual process theories of moral judgment and the evolution of morality
Luke Glowacki (University of Utah & Harvard University, USA)
14:40 Chimpanzee empathy, pro-sociality and consolation- what is chimpanzee empathy like?
Sonja Koski (University of Cambridge, Cambridge, UK)
15:00 The social uses of shaming in historical societies - a cross-cultural study on conflict, cooperation, and emotion
Joerg Wettlaufer (Universität Kiel, Germany)
15:20 Afternoon coffee & tea with Poster Demonstrations
Chair: Richard Wrangham
16:00 Understanding others' relationships - social intelligence in monkeys and apes
Roman Wittig & Catherine Crockford (University of Pennsylvania, USA)
16:20 Social learning among wild orangutans
Adrian Jaeggi & Carel van Schaik (Universität Zürich, Zürich, Switzerland)
16:40 Why scientists cannot agree about human behavioural universals, what animal cartoons can tell us, and some suggestions as to when and why fundamental human differences evolved
Charles Whitehead (University College London, UK)
17:00 The logic of self-deception
Robert Trivers (Rutgers University, USA)

Thursday, 13. 12. 2007


Chair: Azar Gat
8:30 Social knowledge as a precursor to language
Dorothy Cheney (University of Pennsylvania, USA)
9:15 Ochre, language and the rule of law: a speculative reconstruction of the Middle Stone Age ‘human revolution’
Chris Knight (University of East London, London, UK)
10:00 Morning coffee & tea
Chair: Andrew Whiten
10:30 Seeing red: the effects of colour on agonistic interactions in humans
Robert Barton (Durham University, Durham, UK)
10:50 Monkeys see red too: sexual selection and red coloration in a non-human primate
Joanna Setchell, Marie Charpentier, Leslie Knapp & Jean Wickings (Durham University, UK, Duke University, USA, Université de Montpellier, F, University of Cambridge, UK, CIRM, Franceville, Gabon)
11:10 Variation in alarm calls of sifakas: semantic shift in response to changing predation risk?
Claudia Fichtel (Deutsches Primatenzentrum, Göttingen, Germany)
11:30 Tattling: pre-school children’s use of language to gain third-party support in peer conflicts
Gordon Ingram (Queen’s University, Belfast, UK)
11:50 Humans and apes make friends differently: Implications for the evolutionary emergence of language
Jean-Louis Dessalles (École Nationale Supérieure des Télécommunications, ParisTech, Paris, France)
12:10 Leg stretcher
12:15 The foundations and function of cooperation in primate groups
Joan Silk (UCLA, USA)
13:00 Lunch
Chair: David Bjorklund
14:00 Chimpanzees are rational maximizers in an ultimatum game
Keith Jensen, Josep Call, Michael Tomasello (MPI Evolutionary Anthropology, Leipzig, Germany)
14:20 The evolution of human cooperation: ecological and intra-cultural variation in normative behaviour
Shakti Lamba (University College, London, UK)
14:40 Prosociality in common marmosets: Explaining systematic variation
Judith Burkart & Carel van Schaik (Universität Zürich, Zürich, Switzerland)
15:00 Information can be free: Implications for recent developments in the evolution of altruism
Joanna Bryson (Konrad Lorenz Institute, Altenberg, Austria)
15:20 That’s what friends are for: Friendship and tolerance to underbenefiting in humans and nonhuman primates
Jorg Massen, Rita Smaniotto, Elisabeth Sterck & Henk de Vos (University of Groningen, University of Utrecht, Biomedical Research Center Rijswijk, Netherlands)
15:40 Afternoon coffee break
Chair: Laura Betzig
16:10 Twins versus singletons: Litter size and reproductive strategies in males and females of small New World monkeys
Gustl Anzenberger, Barbara Falk & Franziska Mattle (Universität Zürich, Switzerland)
16:30 Primate models of reproductive synchrony/desynchrony can explain differences between Neanderthals and modern humans
Camilla Power (University of East London, UK)
16:50 Childhood stress but not parent-child relationships are consistently associated with reproductive development and timing in women
David Coall (University of Basel, Switzerland)
17:10 Life history implications of mortality and fertility universals among humans
Michael Gurven (UC Santa Barbara, USA)

Friday, 14. 12. 2007


Chair: Chris Knight
8:30 Culture in primates
Andrew Whiten (St. Andrews, UK)
9:15 Culture and human evolution
Robert Boyd (UCLA, USA)
10:00 Morning coffee break
Chair: Joan Silk
10:30 Time as a constraint on primate social ecology
Robin Dunbar (University of Oxford, UK)
11:15 Social networks in monkeys, apes and humans
Julia Lehmann & Robin Dunbar (Oxford University, Oxford, UK)
11:35 Similar processes underlie aberrant conflict management in aggressive primates and humans
M Kempes, B Orobio de Castro & Elisabeth Sterck (Utrecht University, Utrecht, Netherlands)
11:55 Variation in group decision-making and its determinants in non-human primates: insights from current baboon research
Andrew King (Zoological Society & University College, London, UK)
12:15 Leg stretcher
12:20 Glucocorticoid and testosterone levels associated with friendship formation in wild olive baboons (Papio hamadryas anubis)
Marc Shur, Ryne Palombit, Patricia Whitten (Rutgers University & Emory University, USA).
12:40 Evolution of human social monogamy by maximisation of inclusive fitness
Laura Fortunato & Marco Archetti (University College London; University of Oxford, UK)
13:00 Lunch
Chair: Michael Gurven
14:00 Coming out of the kitchen: Why sex differences in humans are not universal
Monique Borgerhoff Mulder (UC Davis, USA)
14:45 Bonding and conflict between the sexes: reproductive strategies in non-human primates
Ryne Palombit (Rutgers University, USA)
15:30 Afternoon coffee break
Chair: Robin Dunbar
15:50 The end of the republic
Laura Betzig (Ann Arbor, USA)
16:35 Conference summary
Carel van Schaik

19:30

Party!
(German Primate Centre (DPZ), Kellnerweg 4)

Más información en: http://www.soziobio.uni-goettingen.de/welcome.html


martes, 13 de noviembre de 2007

Sucedido en Riudellots

Quiero mostrar mi desacuerdo ante la noticia aparecida en el periódico La Vanguardia el pasado 21 de octubre, en la cual se decía: "Un mosso d'Esquadra mata a un chimpancé que se había escapado". En ningún momento el animal mostró hacia el agente una "actitud amenazante". Pancho (el chimpancé) se dirigió a un miembro de la Fundació Mona y lo abrazó durante varios minutos porque sentía miedo.

Seguir leyendo noticia

Se le dijo al agente que se agachara, que no disparara, pero el miedo a los humanos nos hace actuar así, sobre todo cuando tenemos recursos a nuestro alcance, como un arma. Se disparó a bocajarro al animal sin justificación alguna.

La gente que esperaba en los coches salió de ellos indignada e increparon al mosso que actuó precipitadamente. Todos sabemos qué poder tienen los medios de comunicación, pero seamos profesionales y no digamos que zarandeó un coche en el que iban niños, o que se encaró contra el agente, para explicar un comportamiento desmesurado, más cuando no es cierto.

Siendo conscientes de que podemos transformar la realidad o la visión de la misma, mostremos cierta relativización de los hechos, sobre todo si la única versión que se ha mostrado es la de los que allí no han estado. La versión real es la lucha de Fundación Mona durante tantos años por salvar a estos animales. Desde aquí mi agradecimiento.


SUANI ÁRMISEN | Girona | 29/10/2007 | Actualizada a las 11:54 - La Vanguardia